LOS JUBILADOS NO TIENEN UNA VIDA DIGNA.
La realidad de los jubilados es tan penosa e injusta. ¿Dónde queda el reconocimiento a los jubilados que dieron parte de su vida por el país ?". Los jubilados reciben una pensión de subsistencia, esa es la triste recompensa por años de trabajo que hace el estado parasitario con todos los jubilados.
El desamparo a los jubilados es total, la jubilación es una triste recompensa por años de trabajo, las pensiones que no reflejan su dedicación y esfuerzo que los jubilados tuvieron en los mejores años de su vida. Vidas sacrificadas, pensiones marginadas, existencias sacrificadas, vidas desfavorecidas, desatendidas, abandonadas, relegadas. Sacrificios ignorados, esa es la triste realidad de nuestros jubilados.
Es lamentable y preocupante observar cómo los políticos reciben sueldos desorbitantes y exorbitantes, mientras que nuestros abuelos, los pilares de nuestra sociedad, luchan por sobrevivir día a día sin tener lo suficiente para satisfacer sus necesidades básicas, es una profunda injusticia social, ver que los políticos disfrutan de todos privilegios y beneficios y que nuestros abuelos, quienes han contribuido durante toda su vida al desarrollo de nuestro país, sufren las consecuencias de una falta de atención y cuidado por parte del Estado.
Nuestros abuelos merecen una vejez digna, donde no tengan que preocuparse por cosas tan básicas como la alimentación y la casa. Es hora de que los políticos rindan cuentas y se comprometan a garantizar una distribución equitativa de los recursos y a poner fin a esta brecha abismal entre los que tienen mucho y los que apenas tienen lo necesario para sobrevivir.
Es necesario que los líderes políticos se sensibilicen y tomen acciones concretas para asegurar que nuestros abuelos sean atendidos adecuadamente y reciban una pensión digna que les permita vivir con dignidad. No podemos permitir que la indiferencia y la falta de empatía continúen prevaleciendo en nuestra sociedad. Debemos alzar la voz y exigir un cambio real en las políticas públicas, donde se priorice el bienestar de nuestros abuelos